Algunas formas de aplicación de la Ergonomía

Algunas formas de aplicación de la Ergonomía




Las diferentes tareas ejecutadas por los operadores humanos, en diversos ambientes y situaciones de trabajo, bajo directivas constantes y, sobre todo, expuestos a niveles variados de automatización conducen a una gama diferenciada de exigencias de capacidad para los trabajadores. Por éstos, ciertos trabajos requieren decisiones rápidas y tratamiento de grandes cantidades de información, otros exigen la acción prolongada de los mismos músculos o la permanencia en la misma posición durante largo tiempo, incluyendo aquí los trabajos de supervisión y mando. En función de esta diversidad de tareas, de sistemas y de ambientes se pueden distinguir algunas formas de aplicación de la Ergonomía, en una división mucho más didáctica, una vez que en la ejecución de los trabajos ergonómicos esas formas presentan una fusión que requiere que los problemas sean atacados por todos esos ángulos.

- Ergonomía de las actividades motoras o biomecánica: Las variables que hacen parte de las operaciones motoras, como esfuerzo, tipo de músculos empleados, duración de la exposición a las tareas, cantidad de energía requerida, se encuentran en el dominio de la biomecánica. Es un hecho conocido que ciertos músculos poseen mayor capacidad que otros, que el trabajo muscular dinámico presenta exigencias diferentes a las del trabajo muscular estético. A este respecto escribe Grandjcan (1.969), "El ser humano debe evitar a toda costa grandes esfuerzos musculares estéticos, pues ellos acarrean una fatiga prematura". Para que esos problemas u otros similares sean evitados o limitados, los estudios de Ergonomía de las Actividades Motoras tratan de estudiar los mejores tipos de comandos, palancas, pedales, así como sus interacciones con las sillas, asientos, bancos y postura del operador. Como ejemplo de investigación en el campo de la Biomecánica, Tanaseseu y otros (1.969) estudiaron el esfuerzo físico de adolecentes en diversas posturas de trabajos de pulimiento. En este experimento fueron examinados jóvenes de una escuela profesional que trabajaban durante 20 minutos en cada una de las tres posiciones de trabajo: ortostatismo, posición inclinada a 90 grados y en posición agachada (en cuclillas). El programa se desarrollaba durante seis horas en total y entre cada una de las sesiones había 15 minutos de descanso. Antes y después de las sesiones de trabajo se tomaban las medidas de frecuencia cardíaca, presión arterial, volumen respiratorio y cambios gaseosos. Los resultados demostraron que el trabajo de pulimiento requería, del organismo de los adolecentes, tomar una posición inclinada a 90 grados, más que el ortostatismo. Las exigencias fueron mayores en la posición agachada cuando se la comparó con el ortostatismo.

- Ergonomía informacional: Con el aumento creciente del grado de mecanización del trabajo y el incremento de la automatización, las actividades del hombre han sufrido modificaciones radicales en los últimos tiempos. El operador deja cada vez más de ser una fuente productora de energía a través de la fuerza física para convertirse en el controlador y manipulador de esta misma energía. Hoy en día los operarios y técnicos de una gran industria ya no viven completamente sucios por las grasas y aceites, los humos y los residuos, ni transportan a sus espaldas pesadas cargas, y sí trabajan con blusas blancas, teniendo como sitio de trabajo cabinas confortables con inmensos paneles luminosos, palancas y botones de comando. Por otra parte, si la fuerza física y muscular se encuentra disminuida, la inspección de los paneles y la operación de esos comandos exigen prontitud y gran capacidad de vigilancia, de decisión y sobre todo, de acción rápida y precisa de los operadores, pues las fases del trabajo automatizado se suceden rápidamente y son inter- dependientes, de tal modo que el operador recibe las señales emitidas por los mostradores (indicadores) de los paneles y con rapidez y precisión actúa sobre los comandos. Ahora, son bien conocidos: a) el conflicto rapidez-precisión, éstos es, al imprimir mayor velocidad a la ejecución de una tarea, su grado de precisión queda disminuido y viceversa; b) la limitación de la capacidad humana en el tratamiento de la información, dado que el hombre actúa como una vía única de transmisión de información y no soporta un volumen de tratamiento de esa información superior a su capacidad límite. La Ergonomía Informacional, haciendo uso de principios de la Teoría de la Información, trata sobre todo de adaptar las fuentes emisoras de señales (como paneles, mostradores, agujas indicadoras) y la secuencia de presentación de esas señales a las posibilidades y capacidades de respuesta del ser humano, de modo que la interacción o sucesión señal-respuesta sea optimizada. Se habla de optimización y no de maximización, pues no se trata de maximizar la producción por parte de la máquina, ni de minimizar el trabajo humano, sino de encontrar el punto óptimo en que confluyen las exigencias y las capacidades.